La existencia de una casa religiosa, que daría nombre al pueblo, data de mediados del s.X. Ahora el edificio es propiedad particular. La iglesia de San Andrés conserva su torre de cuatro cuerpos de ladrillo de estilo mudéjar.
Siguiendo la Ribera del Cea, se llega a este segundo núcleo de población, donde sus atractivos más destacados se encuentran reunidos en torno a la Plaza Mayor, a la cual podemos acceder, recorriendo todo el casco urbano, o bien cogiendo la última calle a mano izquierda desde la carretera principal.
Allí, además del Ayuntamiento, encontramos la iglesia y el monasterio, sus dos edificios más notables. La iglesia dedicada a San Andrés, tras diversas reformas, conserva su esbelta torre mudéjar. Puede visitarse contactando con el Ayuntamiento. A la derecha de la plaza, a lo largo de la calle que de ella parte, se extiende "El Convento", perteneciente a la Finca "Casablanca" regentado por la orden benedictina hasta que con la desamortización fue abandonado en el año 1837.
Para finalizar nuestra andadura por este histórico pueblo, del que ya se tienen datos desde mediados del siglo X, lo mejor es darnos un paseo a la sombra de los chopos, por el río.
El día 16 de agosto, San Roque, celebran las primeras fiestas del año con sus típicas verbenas, mientras que el 30 de noviembre, San Andrés, la "parrillada".